miércoles, 8 de junio de 2011

Cara Norte del Mulhacén

El pasado mes de Marzo: Javier, Alex y Alejandro pusimos rumbo al sur, para coronar el pico mas alto de la Península Ibérica: El Mulhacén.

Una vez que llegamos a Granada, nos introdujimos en la famosa Alpujarra hasta llega a un bonito pueblo llamado Capileira, allí siguiendo una pista de tierra llegamos a la estación eléctrica de Poqueira, donde dejamos el coche y preparamos la marcha de aproximación al refugio de Poqueira, la marcha de aproximación tiene un desnivel de unos 1000 metros, y son unos 7km, la marcha en si es sencilla ya que discurre por un sendero y cuando este termina unas balizas te guían el camino, toda la aproximación la realizamos sin nieve y con un calor infernal poco común en esas fechas “30º”. A estoy hay que sumarle el peso extra de todo el material. Al cabo de 4 horas llegamos al refugio donde pronto cenamos, charlamos con la gente del refugio y tras cenar pronto nos vamos a acostar.

Al día siguiente, no empieza muy bien, lo primero por que se nos pegan las sabanas y retrasamos la salida una hora, luego Alex sufre un resbalón que nos demora unos 30 minutos, vamos progresando siguiendo el cauce del rió Mulhacén totalmente cubierto por la nieve, llegamos al Collado de la Mosca, desde donde observamos la increíble cara norte del Mulhacén, aqui el grupo se divide en dos, Alex y Alejandro para bajar a la hoya del Mulhacén y subir este por su cara norte y otro Javi, para subirlo en solitario por su vía clásica, el cual la asciende sin problema alguno.

Sin perder tiempo Alex y Alejandro, con un sol achicharrante y un calor excesivo, llegamos al inicio del Canuto Central, donde progresamos su ascensión de mas de 60º de inclinación, montando una cordada con su respectiva reunión, lo que nos hace demorarnos demasiado, y más tarde pagaríamos.

La ascensión se realiza con una nieve algo blanda montado seguros cada 20-30 metros, o bien en roca o en nieve con anclas y estacas, ya que aunque la progresión no es muy difícil, una caída puede tener fatales consecuencia, los tornillos de hielo no nos hacen falta por la escasez de dicho elemento.

Finalmente hacemos cima justo antes de anochecer, lo que nos obliga a descender todo el Mulhacén con los frontales hasta el refugio de Poqueira, bajando por la loma del Mulhacén, algo desorientados por la noche, pero gracias al mapa. el altímetro y la luz del refugio llegamos a la pista que te lleva hasta este.

En él ya nos estaban esperando un poco nerviosos al no saber mucho de nosotros, menos mal que nuestro compañero bajo bastante antes y con una llamada tranquilizadora desde la cima, pudimos avisar de que estábamos sanos y salvos. Creo recordad que en total dedicamos esa jornada unas 18 horas. Algo poco común, pero el estado de la nieve y las reuniones, nos retrasaron.

Al día siguiente ya sin prisa alguna hicimos la aproximación hasta el coche para volver a nuestras ciudades.















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